
Es importante enseñarle a lavarse los dientes dos o tres veces al día, con una pasta que contenga flúor.
Hay que empezar a quitarle el pañal, y para ello es necesaria mucha paciencia, ya que el control de esfínteres se logra aproximadamente, si es bien llevado, en unos 2-3 meses.
Si la madre vuelve a estar embarazada, es importante explicarle al niño que va a tener un hermano/a, etc. y prever el impacto del embarazo en un niño de dos años de edad.
A esta edad también empiezan a imitar a sus hermanos o a los padres, y hay que tener cuidado con lo que se hace enfrente de él. (Por ejemplo, los papás no deben afeitarse nunca en presencia del niño, que tratará de imitarles en el manejo de la maquinilla de afeitar en cuanto esté solo).
Esta es la edad de las rabietas, y la presencia ocasional de rabietas es completamente normal a los 2 años de edad. No conviene hacerles demasiado caso o pronto aprenderán a utilizarlas para manejar a sus padres.
Los padres tienen que jugar con las niñas y niños adaptándose a las preferencias de los críos y sin sexismo.
Hay que seguir estimulado el desarrollo del lenguaje por medio de la lectura de libros y con canciones. Charlar con el niño con respecto a lo que están haciendo y viendo. Los padres deben nombrar todo lo que hay alrededor, indicar objetos comunes, y partes del cuerpo, y alentar al niño a decir las palabras.
Nunca dude en consultar con el pediatra ante cualquier duda que pueda tener con respecto al desarrollo de su hijo.