Si ya se le ha diagnosticado espasmo del sollozo a tu niño, sigue estos consejos para poder ayudarlo ante cunado haya un episodio:
- Si ya se le ha diagnosticado a tu bebé este trastorno, tu niño no corre ningún riesgo. Se paciente.
- Si presenta una crisis de espasmo y tiene algún objeto en la boca, quítaselo para evitar que se ahogue.
- En mometos de la crisis, ubícalo de costado y trata de mantenerlo alejado de los objetos que puedan golpearlo.
- No intentes nada para detener el espasmo, pues podrías interferir en el proceso habitual y complicar la situación. Aléjate un poco cuando suceda.
- El espasmo del sollozo es involuntario, pero cabe la posibilidad de que tu niño aprenda a utilizarlo para llamar la atención o como un berrinche para conseguir algo, por ello, deberás explícale que no te gusta que juegue con su malestar.