La causa principal de la constipación en el niño es la clase de alimentación que ingiere.
El niño que es alimentado con leche materna dificilmente padece de constipación. Los nutrientes de este tipo de leche se absorbe casi en su totalidad, por lo que deshechará muy poco (una vez por semana). Su materia fecal es blanda y de color amarillento.
En cambio, si alimentas a tu niño con leches maternizadas, este puede ser intolerante a sus proteínas, lo que causaría la constipación. Si es tu caso, puedes cambiar por leches en base a soja, que tienen el mismo valor nutritivo.
También, no exageres en su alimentación. Darle más leche de lo que necesita – o espesarla más de lo que debe- puede traer como consecuencia la constipación.
Otra causa, poco común, es la exposición del bebé a climas cálidos. En el gasto de energía, puede perder líquido, por lo que será necesario que le administres cantidades pequeñas de agua con una cucharita en su boquita.